Comunicados de prensa
25 marzo 2014
La decisión adoptada hoy por el Tribunal Municipal de Moscú de confirmar la declaración de culpabilidad del manifestante pacífico Mikhail Kosenko es una perversión de la justicia que hará que Kosenko sea recluido en una institución psiquiátrica, potencialmente por tiempo indefinido, para ser sometido a un “tratamiento” que ni necesita ni desea, ha declarado Amnistía Internacional.
Mikhail Kosenko fue detenido tras participar en una protesta en la plaza de Bolotnaya en mayo de 2012 que terminó con actos de violencia. Fue acusado de participar en “disturbios masivos” y de emplear la violencia contra agentes de policía, acusaciones que Amnistía Internacional considera de motivación política y que contradicen indicios sólidos que no se tuvieron en cuenta en el juicio.
“En el caso de Mikhail Kosenko, los tribunales están volviendo a una práctica abominable que recuerda a la peor de las tácticas de la era soviética para aplastar la disidencia: el uso del tratamiento psiquiátrico forzoso como medio para castigar a los críticos”, afirmó Sergei Nikitin, director de la Oficina de Moscú de Amnistía Internacional.
“El Tribunal pareció no tener en cuenta numerosas incoherencias y distorsiones de los hechos contenidas en el informe de los peritos en psiquiatría y en los testimonios de la policía, así como ignorar las pruebas que respaldan la inocencia de Mikhail Kosenko.
“La única transgresión de Mikhail Kosenko fue protestar pacíficamente y expresar su opinión. Hay que rectificar la grave injusticia que se ha cometido contra este hombre, que debe ser puesto en libertad inmediata e incondicionalmente.”
El Tribunal denegó la petición de los abogados de Mikhail Kosenko de que se realizara una evaluación psiquiátrica adicional, tras alegar que la original fue incompleta y estuvo llena de incongruencias. El órgano judicial citó las convicciones políticas de Kosenko como prueba de su enfermedad mental.