Ante la escalada anoche de las hostilidades entre Israel y grupos armados palestinos en Gaza —los combates más graves desde el conflicto armado de 2014—, Saleh Higazi, director adjunto de Amnistía Internacional para Oriente Medio y el Norte de África, ha declarado:
“La alarmante escalada de la violencia en Gaza de anoche suscita el temor a la posibilidad de presenciar otro repunte del derramamiento de sangre de civiles. Según el derecho internacional humanitario, todas las partes en un conflicto tienen la clara obligación de proteger la vida de la población civil atrapada en las hostilidades.
“Efectuar ataques aéreos contra edificios en zonas densamente pobladas pone en peligro la vida de civiles. Las fuerzas israelíes deben abstenerse de realizar ataques indiscriminados y hacer todo lo posible para asegurarse de que se preservan las vidas civiles y se previenen los daños a viviendas, instalaciones e infraestructura de carácter civil. El ataque deliberado contra bienes de carácter civil y la destrucción generalizada e injustificada de propiedades son crímenes de guerra.
“Israel tiene un historial de violaciones graves del derecho internacional humanitario en Gaza que incluye crímenes de guerra, cometidas con impunidad y con un flagrante desprecio hacia las vidas palestinas.
“Los grupos armados palestinos, incluido Hamás, deben asimismo dejar de lanzar cohetes de efecto indiscriminado y ataques directos contra la población civil y bienes de carácter civil. Tales ataques son violaciones graves del derecho internacional humanitario y constituyen crímenes de guerra.
“Si la situación se agrava hasta convertirse en un conflicto armado en toda regla, tendría un impacto desastroso en los casi dos millones de residentes de Gaza, que ya viven en condiciones terribles de pobreza y privación de derechos. Gaza está ya al borde de una catástrofe humanitaria provocada por los 11 años de bloqueo brutal e ilegal, y la devastación causada deliberadamente por tres conflictos armados anteriores. Otro conflicto armado podría acelerar el hundimiento total de Gaza; la ONU ya ha advertido de que la vida en Gaza será ‘imposible’ en 2020.
La comunidad internacional debe usar su influencia para presionar a todas las partes a fin de que respeten las leyes de la guerra y dejen de poner en peligro a la población civil en Gaza e Israel. Debe dejar claro a todas las partes que los perpetradores de crímenes de guerra responderán de ellos ante la justicia. La rendición de cuentas sigue siendo el único medio de impedir que se repitan los crímenes cometidos en el pasado”.
Información complementaria
Dos civiles palestinos murieron y 20 resultaron heridos, cinco de ellos menores de edad, en los ataques aéreos de Israel que comenzaron anoche. Un civil palestino de Cisjordania murió en Israel y otras 70 personas resultaron heridas como resultado de los cohetes lanzados por grupos armados palestinos.