Ante la condena a muerte de 188 personas impuesta hoy en Egipto por el asesinato de 11 policías en la ciudad de Kerdasa en agosto de 2013, Hassiba Hadj Sahraoui, directora adjunta para Oriente Medio y el Norte de África de Amnistía Internacional, ha declarado:
“La condena a muerte de 188 personas en Egipto hoy no es más que otro ejemplo de cómo el sistema de justicia penal del país está fuera de control. Estas últimas condenas muestran claramente que existe una constante de condenas masivas a la pena capital en casos de muertes de policías.”
“Es revelador que esta condena, la tercera de este tipo que se impone este año, se haya dictado la misma semana que se retiró la causa contra el ex presidente Hosni Mubarak y el ex ministro del Interior Habib al Adly y sus ayudantes fueron absueltos de todos los cargos sobre muertes de manifestantes durante la ‘revolución del 25 de enero’. Es un caso flagrante de justicia aplicada en función de un capricho político.”
“Las autoridades egipcias tratan de escudarse de las críticas proclamando a los cuatro vientos la independencia del poder judicial egipcio. Pero en un caso tras otro, el sistema de justicia penal de Egipto muestra hasta qué punto está quebrado.”