13 de diciembre de 2013
Habría sido fácil olvidar a Bimbo Osobe si hubiera desistido y pensase que no podía seguir adelante. Estaba entre los miles de personas que vieron impotentes cómo demolían sus casas y sus negocios el 23 de febrero de 2013 durante un desalojo forzoso en Badia East, estado de Lagos (Nigeria), que contaba con el visto bueno de las autoridades estatales.
Cuando en mayo Amnistía Internacional habló por primera vez con ella, Bimbo dormía a la intemperie bajo una red y se recuperaba de la malaria. Desaparecidos sus medios de subsistencia, Bimbo dependía por completo de amistades y personas de buena voluntad para obtener comida y ropa.
Envió a sus hijos a vivir con familiares, pues les quería ahorrar las penurias y el estrés por el que estaba pasando.
Pero Bimbo no quiere ser una víctima: quiere justicia. Cuando volvimos a encontrarnos con ella en agosto, ya había empezado a transformarse y a cambiar la situación de su comunidad a través del activismo.
Gracias a un vecino compasivo, Bimbo encontró un lugar donde vivir en una zona de Badia East que había escapado a los buldóceres. Ahora ayuda a otros residentes a encontrar una vivienda alternativa adecuada y a obtener una indemnización. Sigue separada de sus hijos, pero consigue enviarles libros de texto comprados con el dinero que recibe de simpatizantes.
En la presentación de un informe de Amnistía Internacional sobre Badia East que tuvo lugar en agosto, Bimbo dirigió a la comunidad en cantos de solidaridad y motivación. También actuó de intérprete durante un taller sobre el derecho a la vivienda y habló con fervor ante los miembros de la comunidad.
En una mesa redonda sobre el derecho a una vivienda adecuada celebrada en el estado de Lagos, Bimbo instó a las autoridades a reasentar e indemnizar a las personas afectadas.
Amnistía Internacional hace campaña para poner fin a los desalojos forzosos en Badia East y para que todos los afectados reciban una indemnización y otras medidas de protección. Sin embargo, la comunidad continúa en peligro: el gobierno estatal ha anunciado que pretende demoler la comunidad entera en otros dos desalojos forzosos.
La solidaridad internacional pondrá todo su empeño en ayudar a los habitantes de Badia East a seguir luchando por el derecho a una vivienda adecuada. Bimbo dijo: “Agradecemos a Amnistía Internacional el apoyo que nos ha dado tras las demoliciones y queremos que nos sigan apoyando y nos ayuden a luchar por nuestros derechos”.
Ella y los demás activistas tienen previsto exhibir todas las postales de solidaridad que reciban en el centro comunitario y lugar de reunión Better Life Community Centre.