Las autoridades chinas deben abandonar su caza contra quienes consideran que están detrás de la publicación de una carta en la que se pide al presidente Xi Jinping que dimita. Así lo ha manifestado Amnistía Internacional, después de que se revelara que los familiares cercanos de un destacado disidente han sido los últimos en ser detenidos.
Las autoridades deben cesar la persecución política de las personas sospechosas de estar detrás de la carta abierta, y poner en libertad a todas las que han sido detenidas en relación con ella.
William Nee, investigador de Amnistía Internacional sobre China
Wen Yunchao, de 45 años, bloguero chino y detractor del gobierno de su país que actualmente vive en Nueva York, dijo el viernes que a su madre, Qiu Xiaohua, de 65 años, a su padre, Wen Shaogan, de 72, y a su hermano menor, Wen Yun’ao, de 41, se los llevó la policía de la provincia de Guangdong, en el sur de China, el 22 de marzo.
Se cree que la policía ha detenido al menos a 20 personas en relación con la publicación de una carta abierta en la que se critica al presidente Xi. Entre ellas se encuentran 16 personas que trabajan para Wu Jie News, el sitio web que publicó la carta este mismo mes, y sobre cuya detención informó la BBC el viernes.
“Las autoridades deben cesar la persecución política de las personas sospechosas de estar detrás de la carta abierta, y poner en libertad a todas las que han sido detenidas en relación con ella”, ha manifestado William Nee, investigador de Amnistía Internacional sobre China.
“La persecución de familiares de disidentes es una táctica draconiana e ilegal que convierte en burla las afirmaciones de China cuando dice respetar el Estado de derecho.”
El 17 de marzo, las autoridades obligaron al padre y el hermano de Wen Yunchao a ponerse en contacto con él y presionarlo para que desvelara lo que sabe sobre quién está detrás de la carta en la que se critica al presidente Xi, y sobre quién ayudó a difundir la noticia sobre dicha carta. Las autoridades dijeron que el hermano de Wen Yunchao perdería su empleo si Wen no hacía lo que le pedían. El uso de la presión psicológica para obtener una “confesión” está prohibido por el derecho internacional.
Wen Yunchao asegura desconocer quién está detrás de la carta o haber tenido algo que ver en su publicación.
El 15 de marzo, la policía de Pekín detuvo al conocido columnista chino Jia Jia, que había debatido con el director de Wu Jie News sobre el contenido de la carta. El abogado de Jia Jia ha informado de que, hasta el momento, no ha podido averiguar el paradero exacto de su cliente, ni cuál es exactamente su situación legal.
La carta abierta culpa al presidente Xi de tratar de crear un “culto a su personalidad” y de abandonar el liderazgo colectivo en una personalización del poder sin precedentes. La carta fue rápidamente eliminada del sitio web, pero ha circulado ampliamente por Internet.