El gobierno de India ha accedido hoy a aumentar la demanda de indemnización por valor de varios millones de dólares contra Union Carbide por la fuga de gas de 1984 en una fábrica de pesticidas, que envenenó a más de medio millón de personas.
El gobierno ha prometido revisar la cifra de muertos y heridos por los que solicitaba indemnización para acabar con una huelga de hambre emprendida por cinco mujeres el 10 de noviembre, que se niegan a recibir alimentos por vía oral.
“Es una gran victoria para los supervivientes de la fuga de gas de 1984, pero las siguientes generaciones de habitantes de Bhopal siguen sufriendo, pues los productos químicos abandonados por Unión Carbide hace 30 años continúan filtrándose en las aguas subterráneas”, ha dicho
Audrey Gaughran, directora de Asuntos Temáticos Globales de Amnistía Internacional.
Las mujeres que están en huelga de hambre, apoyadas por otros 200 supervivientes y activistas, han sido convocadas hoy a una entrevista con el ministro de Productos Químicos y Fertilizantes, Ananth Kumar.
El ministro se ha comprometido por escrito a revisar las cifras que el gobierno manejaba en la demanda de indemnización, y ha prometido hacerlo antes del 30 aniversario de la tragedia de Bhopal, el 2 de diciembre. También se ha comprometido a garantizar que los supervivientes que aún no han recibido indemnización recibirán lo que les corresponde.
“Expresamos nuestra satisfacción por esta importante decisión. Ahora el primer ministro Modi tendrá que asegurarse de que su gobierno hace honor al compromiso contraído”, ha dicho Audrey Gaughran.
“Sería un paso histórico para la justicia en Bhopal.”
Supervivientes, activistas y quienes los apoyan internacionalmente, como Amnistía Internacional, critican desde hace mucho tiempo al gobierno por el cálculo muy a la baja del número de muertos y heridos que efectuó en una petición de reparación contra el acuerdo extrajudicial con Union Carbide de 1989.
El gobierno cifró en 5.295 el número de muertes, en 4.902 el de personas con incapacidad permanente y en 42 el de heridos graves.
Los activistas reclamaban que en la petición figuraran 22.917 muertes, 508.432 casos de incapacidad permanente y 33.781 casos de heridos graves.
El gigante corporativo estadounidense Dow Chemicals es propietario de Union Carbide desde 2001, pero se ha negado a obligar a su filial a volver a India para enfrentarse a los cargos pendientes de homicidio culposo. Ambas empresas se niegan a pagar la limpieza de la contaminación del lugar.
El gobierno estadounidense debe apoyar los esfuerzos de India para que Unión Carbide comparezca ante la justicia.
“La decisión de India debe ser una llamada de alerta para Unión Carbide y sus dueños de Dow Chemicals,” ha dicho Audrey Gaughran.
“La historia de Bhopal no se ha olvidado y perseguirá a Union Carbide y Dow Chemicals hasta que se haga justicia.
Igualmente, India debe realizar por fin las tareas de limpieza de la fábrica de Bhopal, una mancha en la conciencia de sucesivos gobiernos desde hace 30 años. Las acciones valen más que las órdenes judiciales.”
